Cambio



Cada vez que iba a la playa, me ponía protector para tomar sol y ni bien reclinaba la reposera aparecía mi sombra y lo tapaba, dejándome muerta de frío y blanca. Tiritando, me vestía rápido porque empezaba a llover. Corría a buscar un paraguas pero ya me había empapado hasta los huesos.
Mil veces pasó lo mismo.
Fui a devolver la sombra porque ya no la aguantaba más. Empecé a elegir en el perchero entre las colgadas, había oscuras y claras. ¿En qué la puedo ayudar? Quiero cambiar mi sombra, la que más me gusta es la transparente. No se aceptan las usadas, y ¿cuál es el problema de la que tiene?
¡Es que se la pasa lloviendo!
No sabía nada de negocios ese hombre, porque dijo que me quedara con la propia y que después de llover un montón, seguro que iba a salir un solazo. Está loco, voy a seguir buscando donde cambiarla. No pienso soportar ni una gota más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario